28.7.09

U2 Olympia-Stadion (Berlín)

Comenzaré por confesar que no fui al estadio olímpico de Berlín en la linea de metro número dos (U2). La coincidencia era poética, pero el camino muuucho más largo. Originalmente quería llegar temprano para alcanzar buen lugar, pero organizar a cuatro personas de las cuales sólo una es fan from hell... pues no es tan fácil. Afortunadamente, el concierto que viene sí voy con otro fan from hell asi que estaré ahi desde que habran las puertas de la arena. La otra ventaja es que el lugar donde acabamos me permitió tomar buenas fotos del tinglado, que estando más cerca no hubiera visto muy bien. Aqui voy a decir que quedé muy contenta con el diseño de esta gira, creo que montaron un gran show. De ahora en adelante la crónica estará llena de spoilers, los que tienen boleto para los conciertos por venir, deberían dejar de leer ahora porque definitivamente vale la pena ser sorprendido.

La banda abridora fue Snow Patrol, que honestamente no me traen mucho chiste, pero he de decir que el vocalista tiene mucho carisma y es encantador (no guapo). Me acabaron ganando por su simpatía y para ser justos, tocaron muy bien y cumplieron con su chamba de teloneros de manera más que decorosa.

Una consecuencia de asistir a conciertos en el verano del norte de Europa es que anochece tardísimo. Por primera vez me tocó ver a esta banda comenzar un concierto rodeados de luz natural, cosa que no ayudó con la atmósfera para las primeras canciones. Abrieron con cuatro seguidas del nuevo disco, lo que se me hizo algo injusto porque algunas hubieran sido mucho mejor brincadas y cantadas ya entrados en calor y en lo oscurito... pero bueno. Por cierto, el setlist esta aqui para referencia. Yo esperaba que tocaran varias canciones de Achtung Baby! dado que se encontraban en la ciudad que vio nacer ese disco, pero no me esperaba que misterious ways fuera una de las canciones elegidas, siempre me ha encantado en vivo y sigue sonando genial.

La primera sorpresa de la noche fue que mientras oíamos los acordes introductorios de Angel of Harlem, una y otra vez, nomás no aparecía nada de la voz. Las pantallas mostraron a Bono hablando con un muchacho, luego yendo a hablar con Larry, que se paró de su batería y dejó sentar a otro muchacho, y luego oimos la petición de "necesitamos un bajo aca". Eventualmente se lanzaron a tocar la canción a siete manos (ese día era el aniversario 60 de la muerte de Billie Holiday), que para mis sorpresa sonó perfecta, con cero errores. Al final Bono se voltea y le pregunta a uno de los chavos "¿cómo te llamas?", a lo que el tipo contestó "Me llamo (algo), vengo de la república Checa, gracias a todos". Sigo sin entender cómo o por qué los tres muchachos checos acabaron en el escenario con ellos, pero la neta se me hizo super buena onda.

He visto muchos conciertos de estos tipos y puedo decir con certeza que nunca había cachado a Bono tan de buen humor, relajado, chacotero. Todo el concierto haciendo bromas e improvisando. Siempre es amoroso, pero ahora lo fue más. En Unknown Caller, las pantallas tenian la letra, un poco a modo de karaoke, asi que todo mundo podía cantar la letra medio rapeadona. Al final de la canción dijo "Ich bin ein..." y se comió el Berliner sacudiendo la cabeza y las manos muerto de la risa como diciendo "estaría mamila hasta para mi". En otro momento se puso a tirar choro mientras las pantallas mostraban una traducción simultanea. Cuando llegó el momento de explicar por qué construyeron esa nave espacial dijo "if it doesn't make you spray vomit... try translating that!". Todo para decir que lo hicieron para estar más cerca de su público. Cursi cursi, pero nos puso de buenas a todos.

Uno de los momentos más emocionantes fue cuando anunció una canción que "fue escrita para esta ciudad, para nuestro amigo Wim, que está aqui con nostros esta noche" (no, no lo vi). Se lanzaron con una muy linda versión acústica de Stay, que realmente enchinó el cuero. Cuando acabaron la canción, el público se siguió de frente con oh oh ooooh oh oh oh... un rato. El momento más emotivo para mi fue cuando la pantalla se empezó a alargar, todo se tiñó de rojo y sonaron los primeros acordes de The Unforgettable Fire. Nunca imaginé que me iba tocar oir esa canción, que es de mis favoritas, en vivo. Fiel a mi costumbre cuando me sorprenden de esa manera, me solté llorando. Juro que no lo puedo evitar.

Otro gran momento inesperado fue cuando aparecieron las caras de los cuatro en fila, sacudiéndose al ritmo de una canción desconocida. Hasta que Bono empezó a cantar me quedó claro que se trataba de un remix extremo de I'll Go Crazy If I Don't Go Crazy..., ¡buenísimo!. La canción original no es mi fascinación, pero ese remix funk con las cabezotas sacudiéndose resultó genial, uno de los momentos más divertidos de la noche.

Después vino el infaltable bloque político en el que se hizo referencia y conciencia sobre la situación en Irán (Sunday Bloody Sunday); sobre movimientos sociales, cooperación y derechos humanos (Pride, MLK) ayudados por un extenso discurso (grabado, por supuesto) de Desmond Tutu, al que Bono llamó "mi jefe"; y finalmente sobre la terrible situación de Aung San Suu Kyi en Myanmar (Walk On) por su eterno arresto. Hicieron literal el nombre de la canción subiendo a muchas personas a caminar en las pasarelas, todas usando una máscara de la admirable mujer. Hubo también una extensa presentación para One, en la que Bono se refirió a todos los grupos y tipos de personas para los que esa canción es importante, desde una pareja de amantes hasta el colectivo gay. La verdad me dio una emoción especial oir esa canción precisamente en Berlín.

El encore consistió en dos joyas y un lugar común. Bono salió vestido con una chamarra como de charro laser muy simpática. La foto de abajo no le hace justicia, la linea de foquitos era una linea de haces de laser que salían en todas direcciones. Eso aunado al micrófono suspendido con forma de volante le dio mucho estilo al asunto. La primera joya fue Ultraviolet, que no pensé que fuera a oir en vivo de nuevo después del Zoo TV tour, ¡que buena es en vivo caray!. El lugar común fue With or Without You, pero la versión tuvo la gracia de que todo mundo sacó sus celulares y varios de nosotros mandamos un "beso" via SMS para hacer una contribución a la campaña RED. La segunda joya fue Moment of Surrender, que es de calle mi canción favorita del nuevo disco. Eso es cerrar con broche de oro.

Yo lo pensé pero mis acompañantes lo dijeron también. Todas las giras grandes deberían tener un diseño como el de esta (al menos en principio). La pantalla de 360 grados realmente hace diferencia en el ambiente del concierto, lo hace mucho más parejo. Como siempre, U2 diseña sus escenarios para que el que está hasta atrás reciba beneficios que no tiene el que está hasta adelante. La araña/nave espacial es mucho más espectacular de lo que parece al principio. Ya que le prenden las luces, echan humito y sacan dos tres adornos, realmente se disfruta mucho. El que la pantalla se estire para hacer uan especie de red, es la cereza en un pastel ya de por sí muy bueno.

Yo soy mayor, ellos lo son todavía más, y nos la seguimos pasando a toda madre en estos conciertos. Son grandes estos irlandeses.

La foto la tomó mi amigo Dave
Recién entrados a la chulada de estadio
La araña floreada de día
Edge, con su encanto de siempre
Larry, serio como siempre
Adam, cool como siempre
Bono, payaso como siempre
Con los checos advenedizos
La araña de noche
Cabezas rebotando... geniales
¿Aurora?
Los paraguas (que no fueron necesarios)
El traje de charro laser
El showman pidiendo besosBaby baby baby, light my way

22.7.09

Viña del mar

Para todos aquellos que argumentan la inutilidad de facebook, aqui les va una bonita historia útil. Desde quinto año de primaria hasta segundo año de secundaria compartí vida y obra con un grupo de personas (fundamentalmente chamacas como yo) que también asistian a la Academia de la Danza Mexicana. La peculiar naturaleza de la escuela nos hizo desarrollar lazos más intensos que los que uno normalmente desarrolla en otros centros educativos. Por esa razón, a pesar de no haber visto a muchas de mis compañeras desde hace veinte años, siguen siendo personas muy cercanas a mi corazón. Facebook entró a la historia cuando me puso en contacto con Talía, una de las compañeras de marras que lleva ya varios años viviendo en Chile. Fue fácil avisarle que iba a ir a Chile a trabajar y entonces organizar un encuentro con ella.

Tanto Talía como Rodrigo (su marido) y Cane (su amorosa mascota) me recibieron en su casa, me pasearon y en general me trataron a cuerpo de reina. Pasé dos días con ellos en Viña del mar. El primero estuvo lloviendo a cántaros, lo destinamos a visitar el museo Francisco Fonck, que entre otras cosas contiene una interesante exposición sobre la isla de Pascua. Mis anfitriones me llevaron a comer una empanadas riquísimas que cumplieron con todo lo que uno esperaría de unas dignas empanadas chilenas. También fuimos a Valparaiso, que ofrece vistas preciosas tanto de la ciudad como del puerto, pero el clima no cooperó, asi que no nos quedamos mucho tiempo. Cerramos el día tomando chelas en un bar con mucha personalidad. Tanto Rodrigo como su amigo Romano (inocentes palomitas) me empezaron a hacer preguntas astronómicas, y los pobres recibieron un mega verbo a cambio... quien les manda.

Mi segundo día en Viña tuvo mejor clima, soleado aunque dos tres frío. Gracias a la falta de lluvia pudimos caminar y caminar y caminar por el centro. Hacia la tarde fuimos a un pueblo cercano (podria llamársele suburbio) via la carretera costera, que es realmente espectacular, tiene unas vistas magníficas. Comimos en uno de estos lugares llamados picá (como fondas) de-li-cio-so. Incurrí en el enésimo mega-atasque de marsicos. De vuelta nos tocó un hermoso atardecer en la costera que fue una gran despedida antes de mi vuelta a Santiago.

Una vez más aprovecho el espacio para agradecerle los buenos tratos a mis anfirtriones y en particular a Talía con las que chismeé taaaan a gusto (imagínense, veinte años acumulados de historias).

Afuera del museo
Valparaiso
Mojado mojado
En las chelas
Centro de Viña
Otro gran atardecer chileno
Con mis anfitriones
Comiendo postre, mmmh
Viña del Mar

14.7.09

Santiago

Volví del desierto hacia Santiago, primero para dar una plática, y luego para pasear un poco. La fortuna quiso que Claudia y yo tuvieramos observaciones en Paranal separadas por poco tiempo, asi que aproveché para verla a ella y a Jared, aunque fue solo un día. Decidimos llevarla tranquila, caminando por el centro, comiendo rico, visitando un un museo, comiendo rico, y comprando chunches.

La primera comida la hicimos en el mercado central. Los mariscos son igualmente impresionantes cocinados y crudos en ese lugar. Fue muy bueno pasear por los puestos para asi aprender que nombre va con que marisco, por ejemplo, en Chile los ostiones son un marisco diferente que en México. De ahi partimos hacia el museo de arte precolombino. Yo esperaba que la colección mostrara culturas sudamericanas, y sobre todo arte Mapuche, pero para mi sorpresa, se trata de una enorme colección que incluye Mesoamérica, el Caribe y muchas culturas sudamericanas. La calidad de las piezas es altísima, lo que hace una colección realmente impresionante. Tomé muchas fotos, pero son demasiadas para ponerlas aca.

La tarde-noche la pasamos en el barrio de Bellavista, buscando nuestros aretes de lapizlázuli soñados (especialmente Jared). Acabamos en un excelente restaurant llamado "Azul profundo", recomendado por mi padre, donde probé el que ahora es mi platillo chileno favorito: chupe de jaiba. Fuera de eso, me impresiona mi capacidad para comer ceviche. Después del agradable día, me despedí de mis amigutos, que agarraron rumbo al norte al día siguiente. Me dio mucho gusto verlos aunque fuera solo un ratito.

Los dos siguientes días los pasé en otro lado (siguiente post) y luego volví a Santiago. Me dediqué una vez más a visitar tiendas para adquirir música, vinos y mariscos enlatados para mi alacena. Acabé pasando el día del padre con un padre ajeno y su familia. Mi amiga Paula me usó de mensajera para madarle un paquete desde Munich a su familia y ellos amablemente me invitaron a comer. Tanto la companía como la comida estuvieron de lujo. Para redondear el día, don Jorge y Luz (la buena onda) me llevaron a dar vueltas por la ciudad en su coche. Fuimos a dar hasta las montañas... y acabé comprando más cosas. Muy a gusto.

Quedé con una muy buena impresión de los chilenos. En general se trata de gente muy amable, discreta, mucho más civilizada que en México (o cualquier otro lugar en Latinoamérica que yo haya visitado). Por supuesto que Chile tiene problemas, pero en general se respira un ambiente mucho más optimista que en otros lugares. Es refrescante ver un lugar en Latinoamérica en el que se respetan las reglas y la gente las defiende.

Clau y yo frente al palacio de la moneda

Jared y yo bajo el palacio de la moneda
Jared y Clau a un lado del palacio de la moneda
Harto marisco y pescado
¡Erizos! (que no comí)
Museo de arte precolombino"Azul profundo", gran lugar
Los andes desde el balcón de Jorge y Luz
La familia de Paula, tan amables
A una cuadra de mi hotel
Santiago desde lo alto
Los Andes detrás (lo juro)
Los Andes desde el avión

12.7.09

Rompecabezas

La imagen astronómica del día de hoy me llamó la atención. Se trata de el principio de un mensaje que fue enviado con una antena de radio hacia varias estrellas cercanas.


Después de analizarlo un rato, Niv y yo logramos descifrar su contenido. Invito a aquellos con gusto por las matemáticas (y mente de geeks) a intentar descifrarlo, está simpático. La solución viene abajo del link, asi que los conmino a no hacer trampa.

Comercial

Me permito anunciar con bombo y platillo el nuevo blog fotográfico de mi señor marido. A diferencia de su página anterior, aca hay RSS feeds (yo ya estoy suscrita), las actualizaciones van a suceder más a menudo, se pueden dejar comentarios, y hay más versatilidad con los tags. La unica parte "mala" es que no se pueden ver slideshows de las subcategorías, ya que siempre se mantiene el orden en que las fotos fueron publicadas en el blog.

Espero que se den una vuelta por el nuevo espacio y no sean rancheros, anímense a comentar.

7.7.09

Paranal

Siempre me he sentido afortunada por haber escogido la astronomía observacional como profesión, pero para ser honesta, mi experiencia en observatorios ha sido más bien escasa. Hasta hace poco, el telescopio más sofisticado que había usado era el telescopio Keck (que tiene el espejo más grande hasta el momento), pero se trataba de un programa ajeno cuyos datos nunca utilicé, y aparte no estaba en la montaña. Todos mis resultados publicados son con datos del telescopio espacial, o del telescopio Gemini, que no admite astrónomos visitantes. Por eso mi reciente visita a Paranal (parte de ESO: European Southern Observatory) fue tan especial, porque yo escribí la propuesta, diseñé el programa y dirgí las observaciones (con ayuda de colegas, claro). También ayudó que el lugar es impresionante, excepcional, el observatorio más fresa de la tierra, por mucho.

Fui acompañada en mi aventura por Behrang, un estudiante de ESO con el que he estado colaborando. Behrang es iraní, bajito y moreno. Invariablemente la gente se le acercaba a hablarle en español. Lo tuve que rescatar de varias conversaciones confusas ¡porque no le creían que no entendía nada!. Desde el avión a Santiago me topé con varios conocidos, entre ellos Jacob, otro ex-estudiante de Austin que también está aca en Alemania. En más de una ocasión me mostró el camino porque ya ha estado ahi varias veces. Yo le pagué traduciendo menús y peticiones a los cocineros. Entre lo más emocionante que nos pasó a Behrang y a mi, fue salir en al noche a ver el cielo, mapa estelar en mano, y descubrir que nuestros dos objetos de estudio consentidos podían verse a simple vista. Es bien sabido, pero confirmo que el cielo austral no tiene madre, es mucho mucho mucho más bonito que el del hemisferio norte. Se pueden admirar el centro de nuestra galaxia, las nubes de Magallanes, la cruz del sur, la constelación de escorpión entera (y no de cabeza) y varios cúmulos globulares... casi me sacó lagrimitas de emoción.

El edificio que aloja a los astrónomos debe ser familiar para los fans de James Bond, porque salió en la última película. Se trata de un diseño discreto, funcional y muy elegante. Entre ingenieros, personal de soporte y observadores, yo calculo que ahi se alojan unas 50-70 personas. La edificación es verdaderamente un refugio ya que los alrededores son parte de un desierto extremo, sin plantas, sin animales (visibles, al menos), con una humedad de 10%, a 2600 metros de altitud. Es lo meas parecido a Marte en la Tierra. Antofagasta, la ciudad más cercana, está a 120 kilómetros. La alimentación es generosa y variada, aunque la calidad es intermedia (con una cantidad asombrosa de aguacate). Hay fotos abajo, pero aca hay fotos profesionales que son mucho mejores que las mias.

Hay que manejar para llegar a la plataforma de los telescopios. Como observador uno tiene dos astrónomos asignados, el de día y el de noche. El primero ayuda a preparar las observaciones y el segundo a operar el telescopio. Ellos son los choferes que lo traen a uno de subida y bajada. Cuatro telescopios (UTs) conforman el VLT (Very Large Telescope). Yo tenía asignado el UT2, con el bonito nombre mapuche Kueyen. Todos tienen nombres mapuches que significan respectivamente sol, luna, cruz del sur y venus. El cuarto de control es uno solo para todos los telescopios, asi que hay bastante gente y ruido ambiente durante la noche de observación. Encima de eso, los telescopios "hablan". Los controles están programados para reproducir grabaciones cuando cada telescopio se mueve o cuando produce una imagen. Los dos sonidos más comunes son: una voz masculina que dice "There is no cause for alarm... but there probably will be", y una voz femenina que suelta una carcajada sabrosísima.

Tenía asignadas dos noches de observación. La primera nos brindó un atardecer impresionante y luego seis horas de calma y descanso porque las nubes no nos dejaron observar. Afortunadamente al final tuvimos cuatro horas útiles. La segunda noche fue super intensa porque tuve que tomar decisiones al vuelo para reponer las horas muertas de la noche anterior, y al mismo tiempo medio ponerle atención a un equipo de grabación en video (tridimensional) que estaba grabando un documental y que me agarró como ejemplo de un astrónomo en acción. En algún momento, ya que se calmaron las aguas, me entrevistaron ahi mismo y la neta se sentía medio raro estar choreandose al público en general mientras tomaba los datos más relevantes de mi programa. Según esto van a hacer una premier del documental aqui en Munich y nos van a invitar, ya les platicaré cuando suceda. Al final de la visita logré obtener todos los datos que quería y disfruté mucho el observatorio, aunque quedé con un serio deficit de sueño.

Recién llegada
La única parte húmeda en el entorno
El fabuloso edificio de la residencia
De noche cubren el domo para que no salga la luz
En el cuarto de control
UT1 y UT2
UT3, VST, y UT4
Atardecer renacentista

Visitando el telescopio mientras las nubes no dejaban abrir el domo
El desierto y yo


Parte del tinglado del documental