2.10.13

Conciertos


Todos los conciertos ocurrieron en el mismo lugar: un teatro maravilloso que es relativamente nuevo y que fue hecho exactamente para hacer honores a la música en vivo. Se ve bien de todos lados, la acústica es fabulosa, es fácil llegar, entrar, salir, chupar y en general produce pura felicidad. El segundo piso tiene una galería de fotos de los shows de ACL fantástica. Ahi se encuentran unas áreas VIP que son lounges y se ven super cómodos, la bronca es que se convierten en el bar con el cover más caro de Austin y la gente acaba platicando, importunando así a los que nos sentamos enfrente de ellos... fuera de eso, el lugar es realmente perfecto.

Los últimos tres conciertos ocurrieron en un lapso de cinco días. Estoy segura de que fui la úncia residente de esta ciudad que fue a los tres. Las diferencias demográficas entre la concurrencia fueron muy, pero muy marcadas. Aprovecho para agradecer a todos mis acompañantes y en particular a Jocelly por cuidar a la chamaca cuando llevé a mi marido. Por supuesto, sin el apoyo de mi paciente marido tampoco podría aventarme estos maratones.

- Rodrigo y Gabriela

Hace como dos giras que quería ver a éste par de paisanos, pero en Munich siempre se acababan los boletos para cuando me enteraba del concierto. Ahora un oportuno aviso de Martin, que es muy fan, me permitió verlos. El dueto es increible, son un par de chinampinas. Cuesta trabajo creer que todo ese sonido sale de dos guitarritas acústicas. Los dos son técnicamente impresionantes y me sorpendió descubrir que ella es la que produce la mayor parte del "punch". Se reparten la interacción con el público, con monólogos generosamente rociados de palabrotas que encantan a la fanaticada.

No llevé mi cámara, así que esto es lo mejor qeu pude hacer con el teléfono

- The Cult

No es que fuera mega fan de The Cult en aquellos años, pero ciertamente los tuve en el radar y tengo un disco suyo. Llegamos suficientemente temprano como para estar en primera fila. Hay que decir que en éste teatro de fabulosa acústica, estar hasta enfrente parece disminuir la calidad del sonido... a menos que el ingeniero de sonido fuera el culpable. El kilometraje se les nota a todos, pero sobre todo a Ian Astbury. Supongo que una larga cantidad de sustancias han pasado por sus venas. La voz está bastante bien conservada y tristemente el glamour se fue para nunca más volver. El señor Astbury tiene un caracter gruñón tirándole a hostil, tira monitores y objectos a diestra y siniestra, pero al final igual se gana el corazón de sus maduras seguidoras con una sonrisa perdida por ahi. Tocaron la mayoría de las canciones que yo hubiera querido oir, así que no me quejo.


Astbury antes de tirar el pandero por los aires
Menos glamour, pero la música sigue toda ahí

- Chris Isaak

Para éste concierto me llevé a mi maridito, y fue el único en el que decidí comprar asientos en balcón. No era que esperara que la concurrencia fuera particularmente joven, pero me sorprendió la enorme cantidad de cabecitas blancas que fueron vestidas de vaqueros y vaqueras de piés a cabeza. A mi siempre me ha encantado su voz aterciopelada y varias de sus canciones, pero fue hasta que lo vi en vivo que me quedó claro lo amplio que es su repertorio. Va desde el country honky-tonk hasta el rock, pasando por el blues, jazz, baladas, rock clásico y hasta algo de funk si lo dejan. Encima de estar guapísimo, es un comediante consumado, que a punta de acentos simpáticos y a costillas de sus músicos se acaba echando a la bolsa a chicos y grandes. Se me ocurre que debe ser de esos que siempre le encantó a las suegras. Su hermano fue el abridor y luego lo acompañó un ratito en el show, que tuvo la parte más country de la noche. Mención aparte merecen los atuendos que lució. El primer traje era azul claro con dibujos de lentejuela a los que ninguna foto les hace justicia, eran realmente brillosos, parecía joyero con patas. El segundo traje era el producto de haber cazado y deshollado a varias bolas de disco gigantes. El saco estaba tan pachón, que en algún momento se lo tuvo que quitar para poder tocar la guitarra en paz. Como si su encanto natural no fuera suficiente, el tipo se baja a cantar entre el público, abraza señoras, se sienta a cantarle al oido a uan de ellas, y en algún momento le regaló una guitarra de 3000 dólares a una guapa muchachona de primera fila. Dado que nunca me va a tocar oir a Elvis o a Jerry Lee Lewis, oir sus canciones cantadas por éste señor no estuvo tan mal. Ya me gustaba, pero con éste concierto caí rendida a sus piés, que encanto de hombre.

El traje-joyero
Apapachando ñoras
Organizando el baile
Traje bola de disco

- Cafe Tacvba

Sigo preguntándome si esta es la banda que más veces he visto en vivo. El conteo de las tocadas aquí y acullá de los noventas (Estadio de Práticas, Riviera, ¿los vi en el LUCC?) es la parte que me confunde. En todo caso, esta es la quinta vez que me toca verlos en Austin, en igual número de lugares, siempre uno diferente. El caso es que los conozco bien, muy bien, y por eso se que son garantía de calidad independientemente de si me gusta su último disco. Ahora me acompañó Daniel, con quien ya los había visto antes. Siguen teniendo diseños minimalistas para su escenario, pero es claro que ahora le echan más ganitas a las luces, y efectos pequeños. Los cambios funcionan muy bien para poner el ánimo adecuado a cada parte del show. A diferencia de Mexico, donde tooodo mundo se sabe tooodas sus canciones, acá noté que la banda más bien conoce lo más nuevo. La otra diferencia es que a Rubén ya se le pegó lo tepoztizo por todos lados. No deja de hablar de la madre tierra, el agüita y elementos similares. Aplaudo su activismo, pero en una tocada el tono es algo monótono. Fuera de eso, ellos son cada vez mejores músicos y ya tienen unas tablas enormes en vivo. Son unos maestrazos. El setlist tuvo menos de lo viejo de lo que yo hubiera querido, pero no me quejo. Me encanta que el nuevo disco tiene una canción que me erizó la piel oir en vivo, eso es vigencia en mi libro. Hay que decir que por enésima vez me queda claro que Meme es la pieza musical más valiosa del ensamble, con todo y que la vibra de Rubén es fabulosa y su voz indispensable. En fin, sigo sin arrepentirme de verlos en vivo, con todo lo que los he visto a través de los años. Creo que son y serán la banda más autobiográfica que tendré en la vida.


Los cabecillas
El chulo arbolito con todo y zopilote
Todos