3.1.08

Munich

Tengo la intención de reseñar la visita de mis padres con un post por ciudad (sin contar el post del castillo). Espero terminar antes de emprender mi viaje a Austin, que está a la vuelta de la esquina.

Durante la semana tuve que trabajar, asi que mandé a mis papás a varios museos de la ciudad. Se aventaron dos pinacotecas y el museo Lenbachhaus solitos. Yo los acompañé al Deutsches museum, que una vez más me dejó fascinada. Acabaron conociendo el metro de la parte central de Munich como la palma de su mano y tambien hicieron bastantes recorridos a pie. Realmente le sacamos jugo a los mercados navideños, entre los paseos con ellos y las reuniones pre-navideñas con varios grupos de amigos, la pasamos ahi casi diario.

El fin de semana, nos vinieron a visitar de Suiza Lisa y Jerónimo, madre e hijo que se hicieron amigos muy queridos de la familia en México (hace un buen número de años). Tuvimos un programa intensito pero muy efectivo. El viernes nos fuimos en bola, con todo y mis suegros, a la ópera. Vimos un ballo in maschera de Verdi. Estuvo muy disfrutable, el único negrito en el arroz es que a última hora nos cambiaron al tenor, en vez de el paisano Ramón Vargas, nos pusieron a un desconocido que apenitas dio el ancho.

El sábado tuvimos un movido programa deportivo-arquitectónico que incluyó ir al parque olímpico y a la arena de futbol. La primera mitad del día estuvo soleado, y dado que todo estaba cubierto de escarcha, el paisaje era casi mágico. Para la segunda mitad del día, la niebla nos cayó encima, asi que acabamos viendo una versión fantasmagórica chidísima de la arena. Para colmo de suerte, pescamos justo la hora exacta en la que cambian la iluminación de blanco a rojo, asi que quedamos todos más que contentos con la visita.

El domingo fuimos a la pinacoteca moderna, que entre otras exposiciones, tenía una muy sencilla pero genial. Cuando entramos al cuarto vimos que habían un moton de cosas escritas en las paredes blancas, pero casi todas en una banda horizontal muy específica. Ya viendo de cerca, nos dimos cuenta de que eran nombres con fechas escritas al lado. Lisa fue a preguntar si el asunto era intercativo, y resulta que los nombres estaban escritos junto a una rayita que marcaba la altura de cada persona, y cualquiera podía participar. Las féminas nos apuntamos felizmente. Me pareció una manera elegantísima de mostrar lo que son el promedio, la desviación estandar, y los sesgos estadísticos (niños).

Total que le sacamos jugo a las atracciones turísticas de ésta ciudad, que, acabo de descubrir, funcionan igual de bien en verano que en invierno. Ahi les dejo fotos.

Lago en el parque


¡El mismo lago cinco días después!


Las visitas


Escarcha olímpica


Arena blanca


Arena roja


Sí, soy mas chaparra que el promedio

2 comentarios:

Verde dijo...

Tu foto de la chaparres está fantástica!!!!!

Lo que no cuenta es que te estás comparando contra los teutones...

Galleta *_* dijo...

jajaja.. chaparrita..