Me atacan varias sensaciónes ambivalentes: por un lado me queda clarísimo que los chinos usaron los juegos como propaganda nacionalista, que los directivos de COI y sus representaciones locales son un asco, que el deporte se usa para muchísimas ganancias nada deportivas, que el doping y el sesgo de los jueces juegan un papel nada despreciable en las competencias, etc... pero por otro lado, llevo viendo los juegos con mucha atención desde hace al menos 20 años, me emociona profundamente ver el desfile de naciones, quedé maravillada con las ceremonias de inauguración y clausura de los chinos, se me erizó la piel al ver ciertas competencias (200 m mariposa, 100 m planos) o ciertas premiaciones (la gimnasta alemana de 33 años), y eso que no vi ninguna de las competencias o premiaciones en las que los paisanos ganaron medallas, no hubo manera.
Hablando de los paisanos, también me siento ambivalente. Por supuesto que me da un vuelco de emoción saber que ganan medallas, o que acaban entre los primeros diez de alguna competencia, me encantó ver a la (guapísima) abanderada nacional entrar al estadio, admiro y aplaudo el enorme trabajo personal que deben haber hecho para llegar hasta ese nivel de competencia. Junto a todo esto, me deprime profundamente que Tailandia tenga más medallas que México, no tiene sentido demográficamente (en cuanto al tamaño de la población) ni económicamente, tiene que ser un asunto cultural. Somos el segundo país en niveles de sobrepeso, invertimos poquísimo en educación física, nos importa el futbol de manera desproporcionada (¡y ni asi calificamos!) y los atletas se dan muy pocos cates en competencias internacionales. Creo que hay muchos paralelismos entre el bajo rendimiento deportivo y el bajo rendimiento en ciencia y tecnología.
Otra reflexión tiene que ver con los medios de comunicación. Hasta ahora he podido ver olimpiadas televisadas en tres paises. Con mucho, el peor es EEUU. Ahi prefieren mostrar cinco minutos de una competencia tipo tiro de rifle con aire, en la que algún gringo va en el ranking 28, que mostrar una entretenida competencia atlética en la que los europeos del este dominan. Afortunadamente son buenos en gimnasia, porque esa sí la muestran toda. Hay relativamente poco análisis y mucho festejo... pero también es obvio porque tienen mucho que festejar.
Los alemanes también se enfocan mucho en sus atletas, y no muestran los deportes de menos audiencia a menos que alguno de los suyos gane, pero sí muestran completas las finales de los deportes más importantes. Desafortunadamente, clavados y tae-kwan-do no son de esos. Los comentaristas son sobrios (con excepciones) y en general proveen excelentes explicaciones técnicas. Aca también transmiten dos canales, pero a diferencia de México, aqui se turnan un día uno y otro día el otro.
En México, uno tiene que tener suerte, como toparse con gente tipo Luis Niño de Rivera, que era un absoluto gozo a la hora de los comentarios, pero también hay cada bestia por ahi... en México hay menos atletas propios que seguir, asi que queda bastante tiempo para mostrar otros deportes. Lo que sí es insoportable es el inenarrable despliegue de chundez de los sets olímpicos, y la enorme cantidad de tiempo que le dedican a comediantes imbéciles o a "especiales culturales" que no tienen nada que ver con ningún deporte. En serio es de pena ajena ver el derroche de las dos televisoras nacionales, que no corresponde para nada con el tamaño de la delegación nacional, y menos con los resultados. Los días olímpicos que estuve en México, me encomendé a TVC, ocasionalmente a Televisa, y le hui a TV Azteca como si fuera la peste, sencillamente no aguanté ni dos minutos ahi.
Gracias a la extraña manera de listar paises de los chinos, Alemania y México salieron pegaditos en ambas ceremonias. Eso tuvo la desafortunada consecuencia de que no pudiera ver ni un segundo de la delegación alemana en la inauguración, y ni un segundo de la delegación mexicana en la clausura. Oh well.
Aqui van algunas recomendaciones sobre el tema
1) Un entretenidísimo artículo en el Times (UK) sobre la (extremadamente) activa vida sexual en la villa olímpica. Les dejo el pedazo que más brincó a mis feministas ojos
2) Un post del Mau que tiene completa la entrevista de Carmen Aristegui a Jose Ramón Fernandez y Andrés Bustamante. Se les extraña enormemente.... it is worth noting an intriguing dichotomy between the sexes in respect of all this coupling. The chaps who win gold medals - even those as geeky as Michael Phelps - are the principal objects of desire for many female athletes. There is something about sporting success that makes a certain type of woman go crazy - smiling, flirting and sometimes even grabbing at the chaps who have done the business in the pool or on the track. An Olympic gold medal is not merely a route to fame and fortune; it is also a surefire ticket to writhe.
But - and this is the thing - success does not work both ways. Gold-medal winning female athletes are not looked upon by male athletes with any more desire than those who flunked out in the first round. It is sometimes even considered a defect, as if there is something downright unfeminine about all that striving, fist pumping and incontinent sweating. Sport, in this respect, is a reflection of wider society, where male success is a universal desirable whereas female success is sexually ambiguous. I do not condone this phenomenon, merely note it. (...)
3) Un artículo del New York Times en el que se discute el dañado estado mental de las ligas infantiles en EEUU. ¡Imaginénse lo que pasa en China!.No se sí esto ayuda a explicar parte del rendimiento deportivo de ese país. Aqui los ejemplos más llamativos de barbaridades cometidas.
Take the under-14 soccer tournament in San Juan Capistrano, Calif., in 2001, where about 30 parents were involved in a post-game melee including one man biting and swinging a metal rod. The apparent cause: an assistant coach for the winning team trying to pick a fight with a player.
Take the 13-year-old who three years ago killed a 15-year-old player with a bat after a Pony League baseball game in Palmdale, Calif., because the 15-year-old had apparently teased and taunted him.
Take the T-ball coach in Dunbar, Penn., who the same year paid one of his own players $25 to hit an autistic teammate in the head with a baseball so he would not have to use him during a game.
2 comentarios:
Disfruté los juegos tanto como tú, en especial la natación y el atletismo. Pero en esta ocasión reflexioné mucho más en el elevado costo físico que pagan más temprano que tarde muchos de los deportistas de alto rendimiento.
Apenas me recupero de la vorágine que ha sido mi vida en las últimas semanas, eso por supuesto incluye ponerme al día en correos, blogs y demás. Casi no pude ver los juegos olímpicos, pero me parecen lamentables dos cosas:
1. Que nos sintamos infinitamente satisfechos por haber conseguido únicamente 3 medallas (algunos conductores autocomplacientes se conmovieron casi hasta las lágrimas)
2. El evidente racismo de los "comediantes" de las televisoras...
Publicar un comentario