2.7.11

Antes de partir

Mañana nos toca treparnos al avión para visitar la tierra que vió nacer a Leah. Tanto a ella como a mí, nos va a tocar pasar nuestro cumpleaños lejos (la historia de mi vida). Esta es la última entrega de historias en México antes de que Leah cumpla su primer añote.

Ya estamos de lo más adaptados a nuestra casa. Seguimos teniendo un par de cajas sin desempacar, y no hemos colgado ningún cuadro, pero lo básico ya fluye normalmente. Antes de que el clima pasara súbitamente de un calorón a nublado con lluvia todos los días, teníamos la costumbre de ver a los vecinitos cuando juegan futbol frente a nuetsra casa. A Leah le fascina verlos, y queda perfecto porque se agarra d elos barrotes de la puerta. Parece que está encarcelada, pero ella lo difruta enormidades. Ya con la lluvia, le cayó de perlas el regalo que le hicieron sus abuelos, una torre-casita con resbaladilla y timón(?). Aunque esté lloviendo afuera, nosotros podemos sentirnos en el parque con el juguete. Hoy se subió casi sola por las escaleras, y lo que más le gusta es asomarse por todas las ventanas y decir "¡ah!".

Creo que se me pasó contarles que sus coquetos broches para el cabello quedaron prohibidos después de que se metió uno a la boca y casi se ahoga (en el coche, un susto HORRIBLE). Sin broches, tuvo unas semanas de etapa Beatle, con el pelo en la cara, hasta que un día la peinaron en la escuela con unas liguitas muy delgadas. Ya le agarré el truco al asunto, y ahora generalmente anda con una o dos palmeritas en la cabeza. Se ve adorable.

Hoy asistimos los padres y los abuelos a la magna exposición anual que hacen en su escuelita. Muestran muchas fotos de paseos, días especiales de fiesta, y días normales de trabajo. Adornan todos los salones con la producción asrtística de los chamacos, y además permiten ver todos los espacios de la escuela. Pudimos así ver la enorme cantidad de materiales con los que embarran papel (granos, cereales, polvos) y las decenas de espacios en los que se pasan el día (salón, terraza, biblioteca, arenero, teatro, alberca de pelotas, talleres). Quedamos todos muy complacidos con el show, y aprovechamos para despedirnos de las maestras, ya que de regreso a Leah le toca pasar de año al salón de al lado.

Y bueno, por primera vez me está tocando empacar con la "ayuda" de Leah. Hago pilitas de ropa, y ella se encarga de esparcirlas por toda la alfombra. Empacar para 1.3 meses de viaje no es fácil, no se puede ver uno tan minimalista y aparte tengo que planear el volumen que voy a traer ocupado de regreso con las montañas de cosas que le ha comprado mi suegra en Munich. Lo complicado va a ser la vuelta.

El siguiente reporte va a ser del otro lado del charco. Mientras les deseo a todos felices vacaciones (si aplica) y/o feliz verano.

La carcel desde afuera

La carcel desde adentro (vestida de Niv)

Colitas

Con la tía Galia, paseando en el vecindario

En su torre-casita

Pieza colectiva

Parte de su salón

5 comentarios:

Julia dijo...

Aaaaaaaaah, her pigtails are too cute. And her daycare sounds so great; it is so wonderful when you find a childcare situation that feels right. That is always one of the most stressful parts of working for me.

Julio dijo...

Te dije que tarde o temprano se iba a tragar uno de lo broches. Otra opción es onda Chihuahua, con cachucha, o de plano casco.

Jocelly dijo...

Leah se ve preciosa con sus colitas! Suerte con el viaje, espero que nos encontremos pronto para que me cuentes cómo va todo. Besos.

Anónimo dijo...

Yo también creo que los broches salen sobrando, las liguitas son la neta, como lo demostró Bejarano. Feliz viaje a la tierra natal y feliz estancia.

Poc

Anónimo dijo...

Gracias Eva! que lindas fotos y más las de Munich. Que se sigan divirtiendo, besos. (Galia)